Mark Halperin y John Heilemann, autores del nuevo libro “Double Down”, sostienen que después del primer debate presidencial de la campaña del 2012 el campo de Obama quedó tambaleante.
El gran desempeño de Mitt Romney sembró dudas entre la campaña del presidente, dice una nota en The Hill, que también publica un excerpto del libro que saldrá al público el 5 de noviembre.
Usted me dice que no puedo pasar mucho tiempo defendiendo mi mandato y que yo debería hablar de mis planes”, dijo. “Pero mis planes no son nada en comparación con los planes con que me presenté en el 2008. En aquel entonces tenía un plan universal de atención de la salud. ¿Ahora qué tengo? ¿Un plan de manufactura? ¿Qué voy a hacer respecto a la educación? ¿Qué voy a hacer en materia de energía? Allí no hay mucho. No puedo decir que “está bien, me desperté hoy y supe que tenía que hacerlo mejor, y voy a mejorar”, dijo Obama. “Estoy cableado de una manera diferente de lo que esto requiere”, Obama pausó. “Sólo que no sé si puedo hacer esto.
Los asesores de Obama examinaron encuestas que mostraban que los votantes podrían perdonar al presidente por su desempeño en el primer debate presidencial en Denver, siempre y cuando él saliera con fuerza en el segundo.
El debate en Denver marcó un punto bajo en la campaña por la reelección de Obama porque Romney derrotó a Obama.
Obama tuvo una actuación más fuerte en el debate de Hofstra el 16 de octubre, tan solo unas semanas antes de las elecciones.
