Sin techo, con hambre, Sergio Alvarez probó su suerte pescando en la playa de Malibu en el sur de California, pero en balde.
Entonces hizo lo que muchos hacen a diario en otras partes del mundo: mató un pájaro para comerlo.
Pero el pájaro era un pelícano, especie protegida por el estado. Y lo hizo a vista en plena luz del día.
Fue detenido, informa Cord Jefferson en Gawker, y ahora purgará dos meses en cana por crueldad a los animales.
Según Gawker, el condado de Los Angeles tiene más de 50,000 personas sin techo (con peligrosísimos antros llamados refugios de capacidad para 12,00): durante los próximos dos meses habrá uno menos — Sergio Alvarez quien al menos tendrá tres comidas diarias. A lo mejor reciba un examen mental.
También hay en Malibu un pelícano menos, lo que nos lleva a pensar ¿qué habrán hecho con él?
Foto: via Gawker