Hillary y Goldman Sachs. Los discursos de Hillary Clinton a Goldman Sacks en octubre 2013, después de haber dejado su cargo como Secretaria de Estado y antes de postularse por la nominación del partido demócrata a la presidencia, son como una piedrita en un zapato, una pequeña molestia que lejos de desaparecer sigue intensificando.
Recibió cientos de miles de dólares por ellos.
Según Bernie Sanders, el otro aspirante a la nominación demócrata, muestran en poder del gran capital en la política de EUA. Sanders pide una “revolución política”, que obtenga la independencia del control de la banca — Wall Street — sobre el sistema político estadounidense.
Según él, de ahí surgen gran parte de los problemas del país.
Es parte de la puerta giratoria entre el gobierno y las grandes empresas del país.
Sanders y algunos periodistas pidieron que se hicieran públicas las transcripciones de estos discursos. Inicialmente la candidata dijo que “vamos a ver”. Luego dijo que lo haría cuando todos los demás candidatos — es decir los republicanos — hagan lo mismo.
El problema persiste. Y cada día que pasa surgen nuevas preguntas — después de todo ninguna compañía va a pagar US$675,000 para que la acusen de corrupción política y financiera.
Ben White de POLITICO ubicó algunos asistentes a sus discursos.
“Fue muy halagador hacia nosotros”, dijo una persona que presenció el evento. “Muy diferente de cómo suena como candidato. Fue como un discurso motivador. Sonaba más como un directivo de Goldman Sachs”.
También, según otro participante que habló con POLITICO, dijo que el sector financiero no era el único responsable por la crisis económica del 2008.
Elogió la creación de empleos por parte de la compañía.
Según el análisis de POLITICO, el problema que enfrenta HIllary es que si ella hace públicas las transcripciones, Sanders y otros candidatos progresistas podrían hacer que hasta los comentarios más inocuos suenen como si ella Clinton está firme del lado de Wall Street. Y si no lo hace, parecería que tiene algo que ocultar.
Algunos dicen que lo mejor es que las haga públicas cuanto antes y aguante los golpes políticos.
La última línea de ataque los Clinton (Bill y Hillary) es que Sanders también ha recibido dinero de Wall Street, por vía indirecta, a través del Comité del Senado que apoya candidatos.
