transits2_on_starfield_editable_02_20x30Ya nos estábamos acostumbrando a los descubrimientos frecuentes de exoplanetas — aquellos planetas suficientemente parecidos a nuestra querida Tierra que en la inmensidad del cosmos reúnen las condiciones para abrigar vida.

En cuatro años de su misión, el telescopio espacial Kepler de la NASA descubrió 130 planetas que, igual que el nuestro, giran en torno a un astro y tienen una atmósfera, e identificó sin confirmar a otros 2,700 candidatos, informa Mike Wall, en Space.com 

Kepler, cuya misión dede el 2009 ha sido buscar dichos planetas en la Vía Láctea, nuestra galaxia, identifica los exoplanetas al identificar las reducciones en su resplandor que tienen lugar cuando pasan en frente al astro en cuya órbita se encuentran.

Ahora esta fascinante aventura podría haber llegado a su fin porque se le ha ponchado una rueda a Kepler — la segunda de cuatro sin las cuales no puede enfocar.

Se les conoce como ruedas de reacción, dice Space.com y es mediante ellas que el observatorio mantiene fija su posición en el espacio.

Dice Space.com que los ingenieros de la NASA todavía no han colgado la toalla — pero dado que el telescopio se encuentra a 40 millones de millas de distancia, repararlo presenta serios desafíos.

De ser insuperable la avería, el dispositivo de US$600 millones se convertirá en chatarra espacial.

Queda la ilusión de saber que, en algún lugar de la vertiginosa inmensidad, puede haber otros como nosotros.

Artículo en inglés

Imagen: NASA