Mientras que la congresista Gabrielle Gifford lucha por su vida, los parientes de personas asesinadas lloran sus pérdidas, las autoridades investigan al joven asesino, EUA entró en un proceso de reflexión sobre el significado del atentado que dejó un saldo de 6 muertos y 14 heridos, muchos de ellos de gravedad.

Según informes, la bala atravesó el cráneo de la congresista por el lado izquierdo por detrás sin hacer tanto daño en el cerebro. Las complicaciones que podrían ocurrir son inflamación del cerebro, sangre o convulsiones. Para evitarlas, se le ha puesto en un coma médico. Ella responde a las voces de sus médicos.

El prognóstico es de una lenta y paulatina recuperación.

Por otra parte, se han dado a conocer los nombre de los seis muertos en el atentado, que incluyen un juez federal y una niña de 9 años que quería conocer a su congresista.

Las autoridades dicen que Jared Lee Loughner, el pistolero, había planificado metódicamente el atentado. Entrevistas con algunos de sus conocidos muestran a un joven confundido con problemas psicológicos. Se ha negado a colaborar con las autoridades.

El domingo fue un día de reflexión nacional sobre el tono que se emplea en el discurso político. El tiroteo en Tucson fue el tema que dominó los programas de discusión política en las principales canales de tv, con participantes intentando comprender el significado del siniestro. Los ultraconservadores del movimiento Tea Party niegan que su discurso político haya tenido que ver con el tiroteo.