A diferencia de lo que dijeron los partidariios de Donald Trump en los medios y el gobierno, el informe del fiscal especial Robert Mueller no concluyó la investigación sobre Rusia. Ahora EUA enfrenta tres escenarios.
Son.
Partidarios de Trump: No hubo conspiración con Rusia y el presidente no cometió ningún crimen de obstrucción. Eso es lo que dicen los dos volúmenes que constituyen el informe del Fiscal Mueller. Fue una cacería de brujas. Hay que pasar la página. El fiscal general de EUA, William Barr lo dijo esta semana.
Enemigos de Trump en el Congreso y los medios. Sí hubo conspiración con Rusia, hecho que se demuestra en la larga lista de cargos criminales que se han presentado. Sí hubo obstrucción de Justicia y el presidente estuvo involucrado. Si el informe del Fiscal no imputó al presidente, es porqué el Departamento de Justicia de EUA no permite que se formulen cargos criminales contra un presidente. Ello corresponde al Congreso mediante el proceso conocido como impeachment, que es un jucio político.
El Fiscal Mueller. En su conferencia de prensa esta semana pasada, Mueller dijo que como el presidente no puede ser juzgado por la justicia ordinaria mientras esté desempeñando su cargo, él podía decir si considera culpable al presidente. De hacerlo, le quitaría la capacidad de defenderse, con lo cual se cometería una injustica.
Son esas las tres posiciones.
El campo de Trump dice seguir adelante e investigar a los investigadores.
Los demócratas están divididos. Unos quieren inciar el impeachment ahora mismo. Otros, encabezados por Nany Pelosi, la presidenta de la Cámar, dicen que el país no está listo y es necesario seguir investigando al presidente, en el congreso y los tribunales, para mostrar sus crímenes.
El Fiscal Mueller ha dicho que no va a decir más. Pero si pudiéramos apostar, apostaríamos que va a comparecer ante el Congreso.
Y en el marco de todo, se acerca el fin del primer mandato de Trump y el país entra en la prolongada temporada electoral para las elecciones de noviembre 2020.
Son más de una veintena de candidatos demócratas, cada uno con millones de dólares.
Otra semana que pasó en EUA.
