La muerte en un accidente aéreo de la plana mayor del gobierno polaco ocupa los titulares, tanto por las dimensiones de la tragedia, como por el futuro impacto que tendrá en la política europea.
En días venideros comenzarán a verse sus repercusiones
Recuerda este episodio algo parecido, hace casi mil años, en Europa, durante los días que siguen la invasión normanda (1060) a Inglaterra, y los herederos de Guillermo el Conquistador ocupaban el trono.
En noviembre del 1120, tuvo lugar en Barfleur (Francia) una celebración con toda la pompa del siglo buscando renovar relaciones entre Inglaterra y Normandía.
Cruzó el canal para reunirse con el rey Enrique I que llevaba cuatro años en Francia la crema de la aristocracia inglesa.
Comieron hasta hartarse y bebieron más de lo que debían hasta entrada la noche.
Lo que sigue lo cuenta El Centro de Investigación Submarina Europeo (CERES). “Se preparan a regresar a las costas inglesas a bordo de dos navíos grandes. El Tigre Real y la Nave Blanca. En el Tigre Real va el rey, su corte y 200 caballeros; en la Nave Blanca la familia del rey, sus hijos Guillermo, Ricardo y María acompañados de la noblesa de normandia y Alemania y 200 caballeros”.
La tripulación de 50 remeros completamente intoxicados lleva a la embarcación a unos arrecifes, donde se estrella y en una escena apocalíptica que podía observarse desde la nave real. Mueren todos a bordo.
Los historiadores hablan de una generación perdida. A falta de herederos hombres, estalla la guerra civil en Inglaterra.
