671px-Museo_Nazionale_Napoli_Gabinetto_Segreto_MercuryUn tribunal de Delaware escucha la demanda por daños y perjuicios producidos el doloroso curso que tomó la vida amorosa de Daniel Metzgar, un camionero de 44 años queoptó por una prótesis de pene para lograr las erecciones que su constitución le negaba. 

El dispositivo — que consistía en tres componentes: cilindros, una reserva de líquido y una bomba — tuvo que haber funcionado mejor de lo planeado ya que le produjo una erección que duró ocho meses, informa Esteban Parra para Delaware Online.

Fue sumamente incómodo para Metzgar, sostiene su abogado.

“No podía bailar sin pinchar a su esposa”, “tenía que ponerse ropa floja y una camisa que le cubriera allí”, “agacharse para recoger el periódico” era un calvario. 

Pero las cosas empeoraron cuando el escroto de Metzgar se hinchó hasta alcanzar las dimensiones de una pelota de voleibol. 

Luego, como Metzan no tenía los US$10,000 que habría costado retirarse el dispositivo, tuvo que esperar y en un viaje uno de los cilindros le perforó la piel del escroto.

Desde entonces, dice Delaware OnlineMetzan ha retirado la primera prótesis y colocado otra que funciona. Pero no todo ha regresado a la normalidad: el desafortunado hombre dice haber perdido el 50% de su anatomía en las regiones de su cuerpo que quiso mejorar. 

Por eso quiere que el urólogo pague una suma no determinada.

Artículo en inglés

Imagen: Fresco de Pompeya