La pornografía de revancha, o “revenge porn” en inglés, es una burda canallada y es chantaje y como tal en contra de la ley.
Ahora Kevin Bollaert, creador de la primera página de estas, tendrá que purgar hasta 18 años en la cárcel tras ser declarado culpable de 27 cargos criminales mayores — 21 por robo de identidad y seis por extorsión.
Como dueño de la página UGotPosted.com, obtenía fotos íntimas de mujeres que por lo general le daban novios despechados.
El las colgaba en su página, contactaba a la víctima y les exigía US$350 para bajarla, a través de otra página ChangeMyReputation.com.
Admitió en su juicio que le entraban hasta US$30,000 mensuales por mujeres que pagaban para hacer desaparecer sus fotos.
Bollaert dice que no sabía que era ilegal, que para él era todo un juego.
El tribunal no le creyó.
Además del tiempo en cana, tendrá que aflojar US$10,000 en una multa y US$15,000 a sus víctimas.
Que tiran la llave.
Via Newser
