NEW YORK — No será el cuadro mejor vendido en la historia (“Jugadores de cartas” Cézanne se vendió hace unos meses al estado de Qtar por US$250 millones) , pero con US$119.9 millones el pintor noruego Edvard Munch debe estar feliz en su tumba.
La venta tuvo lugar en New York, en subasta de Sotheby’s. Se la llevó un comprador anónimo.
“El Grito” de Munch es probablemente, después de la “Mona Lisa”, la obra más conocida y discutida del mundo.
Este versión del cuadro es una de cuatro del mismo. Fue pintado en 1895 en pasteles y sigue muy de cerca el original.
De las cuatro versiones de la obra, ésta es la más colorida y vibrante; es la única versión cuyo marco original fue pintado a mano por el artista para incluir el poema que detalla su inspiración; y es la única versión en que una de las dos figuras en el fondo se voltea para mirar hacia el exterior en el paisaje urbano.
“El Grito” había estado en la colección de la familia Olsen desde hace más de 70 años.
Se calculaba que se podría vender alrededor de los US$80 millones: fue casi el 50 por ciento más.
