_71728665_ken_bissetHay algunas historias que casi duele escribir y la de Carol King-Eckersley es una de ella.

Pasados 45 años desde que entregó su hijo para adopción, a la muerte de su maride, ella decidió encontrarlo. Al ubicarlo se enteró de que había muerto en el atentado terrorista de Lockerbie, Escocia en 1988.

“En ese día murieron 270 personas y una de ellas era el único hijo que tuve. Y no lo supe sino hasta abril. En ese sentido fue una tragedia doble: lo encontré y lo perdí en el mismo día”.

Kenneth Bisset, escribe Steven Brocklehurst de la BBC, regresaba a EUA de Londres donde había estudiado como parte de un programa en el exterior de Syracuse University. Murieron en el atentado 35 estudiantes.

Los padres adoptivos de Bisset morirían años después.

Carol King-Eckersley ha tratado de encontrar consuelo enterándose sobre la vida de su hijo biológico.

“De lo que he podido enterarme es que era un joven absolutamente brillante con un magnífico sentido del humor”.

Artículo en inglés