En el mundo de los tahures, el nombre Archie Karas evoca admiración, respeto, temor y envidia: Comenzó con US$50 una racha de suerte que al cabo de tres años le produjo US$40 millones.
Ahora, informa Gabrielle Bluestone en Gawker, el hombre enfrenta cargos criminales por marcar las cartas en un casino, que le acusa de haber robado US$8,000.
Dice Gawker que esta es la cuarta vez que lo detienen por fraude en el juego, bajo acusaciones que incluyen marcar las cartas, cambiar de cartas y aumentar las apuestas cuando ya conocía el resultado.
Esta vez enfrenta en California cargos de robo, hacer trampa y ganar por medios fraudulentos.
Está detenido en Las Vegas, ciudad en donde vive, y posiblemente será entregado a las autoridades de San Diego.
Explica Gawker que los tramposos hacen marcas prácticamente invisibles al ojo humano salvo aquellas personas que las han marcado. Pueden hacerse con papel de lija, con el dedo, incluso con un arete.
También dice que entre 1992 y 1995, Kara, cuyo nombre de pila es Anargyros Karabourniotis, perdió únicamente un juego, llegan a ganar US$40 millones, los cuales volvió a perder tal cual los había adquirido.
Aparentemente dejó US$20 millones en 10 días en las mesas de baccarat.
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