Si hubiera estallado un holocausto químico y nuclear entre el Este y el Oeste durante, la reina de Inglaterra estaba preparada.
Tenía listo un discurso que nos alivia saber permaneció archivado, quizás con curiosidades históricas y otros detalles personales de la monarca.
Pero, según informa Tom Sykes en The Daily Beast, se llegó a un punto en que la Guerra Fría estaba tan caliente que algunos pensaron que la Unión Soviética (¿recuerda lo que fue?) se enfrentaría a una guerra de destrucción mutua contra la OTAN y el Reino Unido.
Dada la eventualidad, la Reina Isabel hablaría a sus súbditos (que horrible palabra).
Traducimos del texto que publica Daily Beast.
“Cuando me dirigí a ustedes hace menos de tres meses todos estábamos disfrutando del calor y la compañía navideña de nuestras familias. Nuestros pensamientos se concentraron en los fuertes vínculos que unen cada generación con la que les precedió y los que la seguirán. Los horrores de la guerra no podrían haber parecido más remotos cuando mi familia y yo compartimos nuestra alegría de la Navidad con la creciente familia de la Commonwealth.
“Ahora, esta locura de la guerra nuevamente se esparce a través del mundo y nuestro valiente país nuevamente debe prepararse para sobrevivir frente a grandes dificultades“,
Concluye: “En nuestro esfuerzo conjunto para combatir este nuevo mal, oremos por nuestro país y los hombres de buena voluntad donde quiera que estén. Dios los bendiga a todos”.
El discurso fue escrito como parte de un ejercicio de juegos de guerra en la primavera de 1983.
En el escenario imaginario, la Unión Soviética lanzaría un ataque químico contra el Reino Unido y la OTAN, que respondería con una andanada de misiles nucleares, lo que obligaría a la URSS a iniciar un proceso de paz.
