Partido republicano EUAAnte la intransigencia total sobre cualquier alivio a las deportaciones que ha llegado a convertirse en uno de los pilares del partido republicano, los aspirantes a la nominación presidencial 2016 han reculado de sus posiciones recientes donde muchos se habían manifestado a favor de algún tipo de vía a la legalización de millones de personas que viven y trabajan en EUA por años.

Informa Jonathan Easley The Hill que tanto Marco Rubio, senador por la Florida, y Scott Walker, gobernador del estado de Wisconsin, “se están arrepintiendo totalmente de su apoyo pasado hacia los planes de otorgar estatus legal a los inmigrantes ilegales”.

Los más conservadores del partido, dice, “han prometido exigir de los posibles candidatos del 2016 una ortodoxia rígida”.

Comenta el comentarista de radio de Iowa, Steve Deace que la discusión siempre debe centrar en lo que “es mejor para EUA”.

Walker dijo que, “He cambiado de parecer. No creo en la amnistía”.

Rubio, en la conferencia conservador CPAC, dijo haber aprendido que no se puede hablar de alivio a las deportaciones “hasta que se pruebe que se controlará la inmigración ilegal”.

Igualmente, el ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee “ha visto la luz”.

Rick Perry, ex gobernador de Texas, sostiene que la inmigración ilegal es “un peligro claro y presente a la salud y seguridad de todos los americanos”.

Ted Cruz , senador por Texas, denunció a los líderes de su partido por haber aprobado el presupuesto federal para el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

Según The Hill, Jeb Bush, ex gobernador de la Florida y hermano e hijo de los presidentes del mismo apellido, “no ha reculado de su apoyo a una vía hacia la legalización para algunos inmigrantes indocumentados. En vez, busca puntos de acuerdo con las bases de su partido”.

Rick Santorum, ex senador por Pennsylvania y Bobby Jindal, actual gobernador de Louisiana, junto con Ted Cruz pueden ser los únicos posibles candidatos que sea considerados “puristas” sobre el tema.

Advierte Alfonso Aguilar, director ejecutivo de Latino Partnership y el American Principles Project, que la dirección de su partido “es problemática y da la impresión de que no hemos aprendido del pasado”.

Artículo en inglés

Imagen cortesía de donkeyhotie via flickr