En el mismo día en que un jurado de Oregón declara inocentes a un grupo de milicianos de derecha que ocuparon, y causado serios daños en un refugio de vida silvestre, la policía en Dakota del Norte detuvo a más de 100 manifestantes indígenas que se oponen al oleoducto que cruzaría terrenos sagrados.
Según informes, alrededor de 200 agentes de la policía local y estatal, apoyados por efectivos de la guarda nacional, atacaron en la mañana del viernes los cientos de ocupantes que intentan detener la construcción del oleoducto Dakota Access Pipeline, un milmillonario proyecto.
Así como en previas ocasiones guardas privados usaron perros contra los manifestantes, esta vez las autoridades llegaron con una presencia militarizada que incluía vehículos de asalto, y policía en uniforme de ataque. Dispararon balas antimotines (bean bags) y spray de pimienta durante más de seis horas, intentando desalojar a los manifestantes del predio. Los activistas sostienen que la propiedad pertenece a la tribu Sioux Standing Rock bajo un tratado del siglo 19.
Esta nueva fase de violencia incrementa las tensiones entre las comunidades indígenas y los constructores de oleoductos que atraviesan tierras ancestrales.
Al mismo tiempo en Oregón fueron exhonerados Ammon Bundy y seis de sus compañeros de la milicia de derecha que en enero de este año ocuparon Malheur National Wildlife Refuge. Enfrentaron cargos de obstaculizar la labor de empleados del gobierno federal. La ocupación duró un mes.
