Revisamos las tácticas policiales que aparecen en casi 400 videos de protesta. Expertos que examinaron videos que documentan agentes e la policía usando gases lacrimógenos, bolas de pimienta y explosivos contra los manifestantes. Las acciones policiales a menudo intensificaron las confrontaciones”.

Así presenta Propublica el reportaje sobre la violencia policial que se ha visto en semanas recientes en EUA y que surgió de las protestas bajo el liderazgo de Black Lives Matter contra los asesinatos por parte de las autoridades de ciudadanos negros.

“A medida que las protestas que denunciaban la brutalidad policial contra gente negra desarmada se extendían por miles de ciudades, circularon videos que se volvieron virales de violencia policial, esta vez, dirigida contra los manifestantes.

Los clips mostraron a los agentes lanzando latas de gas lacrimógeno contra las cabezas de los manifestantes, rociando gas pimienta desde vehículos en movimiento y disparando balas de goma contra la multitud.

ProPublica examinó cerca de 400 publicaciones en redes sociales que mostraban respuestas de la policía a los manifestantes y encontró conducta preocupante por parte de los policías en por lo menos 184 de ellos.

En 59 videos, el gas pimienta y el gas lacrimógeno se usaron incorrectamente; en una docena más, los oficiales usaron porras para atacar a manifestantes no combativos; y en 87 videos, los oficiales golpearon, empujaron y patearon a los manifestantes en retirada, incluidos algunos casos en los que usaron un brazo o una rodilla para presionar el cuello de un manifestante.

“Si bien las armas, las tácticas y las circunstancias variaban de una ciudad a otra, lo que vimos en un caso tras otro fue la voluntad de la policía de intensificar los enfrentamientos.

Los expertos sostienen que las armas que no están diseñadas para ser letales, desde cartuchos ‘bean bag’ hasta granadas llenas de gas pimienta, pueden hacer que los policías estén más dispuestos a responder a los manifestantes con fuerza y ​​menos dispuestos a reducir las situaciones tensas.

“Algunas de estas armas no solo pueden causar daños considerables a los manifestantes, especialmente si se usan mal, sino que los expertos dicen que la mera presencia de las armas a menudo incita al pánico, intensifica las confrontaciones y pone en riesgo a las personas de todas partes”.

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