El sábado, ante los aterrorizados ojos del mundo, la central nuclear de Fukushima explotó, envolviéndose en una pluma de humo radiactivo. No obstante las afirmaciones por parte de las autoridades de que las fugas radiactivas eran mínimas, y que todo se había contenido dentro de las estructuras, poco a poco la información que va saliendo es espeluznante.
Ha habido, dicen, una fusión de núcleo parcial. (No total).
Aquí, escuchamos a Carlos Bravo, directivo de Greenpeace, discutir con Radio Francia Internacional lo que puede estar sucediendo en estos mismos instantes.