En las conversaciones que presentó el FBI como evidencia para detener a Jack Warner, el caribeño aparece alevoso y desafiante, pero ahora suena manso como un cordero y listo a colaborar. Informa ESPN, el canal deportivo de EUA, que el antiguo vice presidente de la FIFA prometió el jueves que iba a asolear los trapitos sucios implicando a todos en la FIFA.
“Me disculpo por no divulgar antes mi conocimiento de estos acontecimientos”, dijo. Aseguró haber entregado documentación a sus abogados. “Ni siquiera la muerte va a detener la avalancha que se avecina. La suerte ya está echada. No hay punto de retorno. Que las fichas caigan donde caigan”. Agregó que teme por su vida.
Warner compró un espacio televisado en Trinidad Tobago, nación de la cual tienen ciudadanía.