La falta de seriedad en el discurso de los candidatos presidenciales de EUA recuerda de dos niños sentados en la silla de atrás de un minivan que no cesan de pelear, escribe Arianna Huffington en su comentario sobre la semana transcurrida.
Faltan 78 días, dice.
El desempleo o subempleo afecta a 25 millones de estadounidenses, más de 13 millones de dueños de vivienda deben más de lo que sus casa valen, apunta. Y de parte de los candidatos, muy poco.
Los candidatos, en vez de ponerle seriedad al asunto prometía el nombramiento de Paul Ryan a la vicepresidencia republicana, se niegan a iniciar un debate serio “sobre el papel del gobierno y la naturaleza del capitalismo”.
En vez, dice, vemos la indignación al chiste del presidente Barack Obama sobre el perro de Romney, críticas al uso por Joe Biden de la palabra cadenas, y discusiones sobre cuál candidato es un “desquiciado”.
Una posible solución, según sugiere Arianna Huffington, sería que para el primer debate presidencial “amarremos a ambos candidatos en un asiento de automóvil, le demos una cajita de jugo a cada uno y dejemos que se peleen”.
