Informan Julia Ainsley y Jacob Soboroff en NBC News que solo 364 entre más de 2,500 niños migrantes separados de sus padres en la frontera con EUA se han reunificado con sus padres. Y solo queda una semana para que se venza el plazo para la entrega de los niños a sus padres en cumplimiento de órdenes de un tribunal.
Documentos presentados por la administración el 19 de julio Trump también revelan que de 1,607 padres elegibles para reunirse con sus hijos, 719 tienen órdenes finales de deportación. Ello significa que podrían ser expulsados del país tan pronto reciba a sus hijos.
Los padres enfrentarán entonces la brutal decisión de regresar con sus hijos a su lugar de origen — muchos de ellos en Centroamérica de donde han escapado la violencia — o dejar a sus hijos en manos de la administración Trump , encerrados y enjaulados en condiciones descritas como deplorables.
“Es una estadística espeluznante”, dijo Lindsay Toczylowski, directora ejecutiva del Centro de Leyes de Defensores de Inmigrantes, de la cifra 719. “Hemos tenido una comunicación tan limitada con los padres que ha sido difícil saber en que estado se encuetran sus caso”. Añadió que el número era “mucho más alto de lo que yo pensaba”, y dijo que, una vez reunidas las familias, los abogados tendrían que asesorarlas sobre las posibles opciones legales que tienen.