Esta nota, por la que agradecemos a Spooky de Oddity Central, nos ha producido tal desagrado que seriamente hemos pensado en no publicarla.

Lo hacemos con la esperanza de que provoque repugnancia entre nuestros lectores: repugnancia por la crueldad con que se trata a un animalito de Dios.

Una página en Singapore publicó un video grabado en un restaurante japonés donde aparentemente la gente come sapos todavía vivos.

Dice que las imágenes muestran a un cliente del restaurante pedir un sapo, el chef lo pica con un cuchillo, le extrae los órganos no comestibles y, con el pobre animal todavía vivo, le quita la piel.

Luego, la clienta que se lo ha comido señala su aprobación.

Eso es pecado.

Nos abstuvimos de publicar el video.

Artículo en inglés