Unos 400,000 adultos en la Gran Manzana han tenido chinches en los últimos años, afectando su salud mental y vida social, indican varios informes.

El Huffington Post informa que la lujosa tienda neoyorkina Bergdorf Goodman ha contratado un perro de cacería Beagle para olfatear los repugnantes insectos. A la vez que negaba la presencia en el almacén de la plaga, la representante de la tienda dijo que parecía lo más prudente hacer.

Según las cifras proporcionadas por funcionarios neoyorkinos, uno de cada 15 neoyorkinos tuvo que bregar con los chinches el año pasado. Al igual que los vampiros, estos parásitos chupan la sangre humana; a diferencia de ellos, sin embargo, no plantean ningún peligro para los seres humanos, fuera de la angustia mental y el visible estigma de la picazón y las ronchas e irritación rojas.

Como alguien dijo a este bloguero, “El que los tiene no los puede negar”.

En New York, se han descubierto chinches en los cines, las tiendas de ropa, los edificios de oficinas igual que viviendas y apartamentos tanto de los ricos y poderosos, como de los pobres y humildad. En el año fiscal 2004, la administración Bloomberg recibió 537 quejas sobre chinches; en el 2009, hubo cerca de 11,000.

¡Qué asco!

Artículo en inglés

Foto cortesía de bettyx1138 via flickr