Esta temporada de vacaciones será inolvidable para millones de estadounidenses y no por las múltiples opciones sino por las limitaciones que les imponen precios nunca vistos en la gasolina.
Como están las cosas, de cada $10 que gana una familia antes de impuestos, casi un dólar va para el tanque de gasolina, lo cual significa que las vacaciones de verano serán bastante más frugales, escribe Jonathan Fahey para la Associated Press.
Dice que el mes pasado el gasto promedio por familia en combustible fue de US$369. Compárese con abril del 2009, que fue de sólo US$201. El dinero que podría ir a autos, ropa, trajes de baño, restaurantes va directo al tanque.
Entrevista a una pareja que sacaron su motocicleta para un viaje de un día. Optaron por comer comida chatarra en el parqueo de una gasolinera en vez de en un restaurante. No hay opción.
Durante la primera semana de junio (Memorial Day) y hasta la última de agosto (Labor Day) millones de estadounidenses tradicionalmente se movilizan de un extremo a otro del país en sus vacaciones. Este año estarán pagando un promedio de US$3.81 por galón.
“Aunque los precios han bajado un poco en días recientes, los analistas esperan que el precio promedio para el 2011 sea más alto que el récord anterior de US$3.25 en el 2008”. Hace un año era US$2.76, agrega la AP.
Indica que cada aumento de 50 centavos en el costo de la gasolina retira US$70 mil millones de la economía en el curso de un año.
