Bajo presión tanto de la izquierda como la derecha, y únicamente después del relevo por la OTAN en el comando de la intervención en Libia, el presidente Barack Obama accedió a dirigirse al país por la televisión esta noche para discutir la polémica operación Aurora del Amanecer.

Según Glenn Thrush de Politico, el presidente tiene que comunicar clara y convincentemente 5 puntos.

1. Rápido. El congreso está contemplando una serie de resoluciones sobre Libia y al presidente le conviene explicar cuál es el compromiso y ofrecer una calendario, así sea esquemático, para la salida, que mientras más pronto mejor.

2. Clave. Obama dijo algo parecido el pasado 23 de marzo:  Si Egipto y Tunisia han podido salir de autócratas, se convierten en modelos de la transición pacífica. Si el caos consume a Libia, “los efectos sacudirían toda la región”, por lo tanto es de importancia enorme para los intereses de EUA.

3. Apoyo. La intervención de EUA logró detener una catástrofe humanitaria de las dimensiones de Rwanda o Yugoslavia. El público de EUA no ha captado este mensaje.

4. Unico. No debe esperarse que EUA haga lo mismo en Siria, Yemen, Bahrain o la Costa de Marfil. No se está sentando un precedente en Libia: básicamente cada crisis tiene su propia dinámica.

5. Firme. Unos acusan al presidente de impulsivo y hacer caso omiso del congreso, otros de haber esperado demasiado, complicando así las cosas. Obama tiene se encuentra en una posición bastante delicada y tiene que decir que no hubo vacilación alguna al tomar la decisión.

Artículo en inglés

Foto cortesía Casa Blanca