El gobernador de Texas, Rick Perry, y el ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney dominaron el debate de precandidatos republicanos el miércoles en la noche por sus constantes ataques mutuos, que indican el punto hasta el cual quieren despejar de candidatos el campo y reducirlo a ellos dos, escriben Jeff Zeleny y Adam Nagourney en el New York Times.
Perry, para quien éste fue su primer debate como precandidato y quien ha encabezado las encuestas desde el anuncio de su candidatura el mes pasado, repitió su polémico rechazo al sistema de Seguridad Social al cual llamó una “mentira monstruosa” y una “estafa” dice el Times.
Por su parte, Romney dijo que la Seguridad Social debe protegerse, sugiriendo que afirmar lo contrario dificultaría al partido republicano ampliar la base electoral necesaria para ganar la Casa Blanca.
Agrega el Times que Romney atacó a Perry llamándolo un “político carrerista”, mientras que recibió sus golpes (por parte de varios candidatos) por el sistema de salud que él implementó en Massachusetts.
Ambos se cuestionaron mutuamente sobre la creación de empleos.
Fue un tono elevado, dice.
Llegó un momento que Newt Gingrich dijo, “No importa quién obtenga la nominación, todos estamos por derrotar a Obama”.
Perry también fue atacado constantemente por Ron Paul, el congresista por Texas quien lo acusó de no ser un “verdadero conservador”.
Respecto al cambio climático, Perry dijo “es algo que la ciencia no ha resuelto todavía”.
Los otros candidatos intentaron hacerse notar, con el antiguo senador por Pennsylvania Rick Santorum atacando la implementación por Perry de una vacuna contra el HPV disponible para niñas tan jóvenes como 12 años.
Por su parte, Michelle Bachmann denunció los precios de la gasolina bajo el presidente Obama.
Bachmann, ganadora de la llamada encuesta de paja de Iowa en agosto, fue la gran perdedora del debate, dice Daily Beast.
“Según las cuentas de unos, durante los 90 minutos iniciales, ella solo habló cinco veces”.
Bachman dijo que el programa de salud del presidente Obama estaba “matando empleos”.
El silencio de Bachmann, continúa Daily Beast, surgió de la falta de preguntas de los moderadores y de cuestionamientos por los otros candidatos, que optaron por enfocar en Perry, recién nombrado favorito de las encuestas.
El debate tuvo lugar en la Biblioteca Presidencial Ronald Reagan en Simi Valley, California.
