Espectro de Richard NixonEsta semana en EUA hemos visto que el espectro de Richard Nixon sigue rondando la política de EUA.

No solo por las posiciones que Donald J. Trump ha tomado para lograr la Casa Blanca, sino también por los trucos que usó el oficialismo demócrata en su afán por asegurar que Hillary Clinton ganara la nominación contra Bernie Sanders.

Contra Sanders, según indican casi 20,,000 correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata (DNC por sus siglas en inglés) filtrados por WikiLeaks, usaron trucos que recuerdan el llamado grupo de los Plomeros, que trabajaban por la reelección de Nixon.

Cuando un burócrata sugiere atacar la religión de Sanders, el otro responde con la palabra “Amén”.

Otro recomienda “plantar” el rumor de que la campaña del socialista está paralizada por el caos.

Todo ello por parte de los capos del DNC — un organismo que se presentó como neutral sobre la contienda.

Nunca fue así.

Secuela inmediata de ello es que para “mantener la paz”, Debbie Wasserman Schultz, la presidenta del DNC, no va a dirigirse a la convención, que abre el 25 de julio en Philadelphia.

Este será solo uno de los problemas que enfrentan los demócratas.

Otro es la nominación por los Clinton de Tim Kaine como candidato a vicepresidente. Kaine, quien en su mitin de presentación en Miami el sábado mostró su manejo del español, ha adoptado algunas de las posiciones que el ala Sanders del partido rechaza, como apoyo a los tratados de libre comercio y la desregulación bancaria.

Todo esto, y manifestaciones masivas, se espera en los tres días de la convención que coronará oficialmente a Hillary Clinton.

Los republicanos concluyeron su propia convención con el discurso más largo, y menos humilde, en la historia reciente de EUA. Durante 76 minutos Donald J. Trump pintó un cuadro de una nación postrada por sus enemigos — latinos y otras minorías, terroristas musulmanes, corrupción empresarial y política — y que él y solo él puede sacar adelante. “Solo yo puedo arreglarla”, dijo en más de una ocasión.

Fue en ese discurso que resucitó a Richard Nixon, al presentarse como el candidato de “la ley y el orden”.

La frase “ley y orden” en el lenguaje político tiene enormes connotaciones racistas.

Es el visto bueno a las fuerzas de la policía a disparar (y a matar) antes de hacer preguntas. Justifica todos los excesos policiales documentados gracias a la tecnología y que han resultado en las muertes de 602 personas, muchas de ellas de color, a manos de uniformados en lo que va del año.

El plagio de Melania Trump, el no apoyo de Ted Cruz, parecen de insignificante importancia ante el mensaje con que Donald J. Trump cerró la convención. Buscó la más ruin entre las frustraciones de algunos segmentos de estadounidenses y ahora intenta potenciarlos para alcanzar la Casa Blanca.

Así, entrado el siglo XXI, sale a relucir nuevamente que Richard Nixon, “Tricky Dick”, dejó un legado político que ambos partidos oficialistas han sabido aprovechar.

Otra semana que pasó en EUA.

Carlos F. Torres

 

 

Carlos F. Torres
Director, El Molino Online
New York, NY 7/24/2016