En las ratas que habían tenido más relaciones sexuales también crecían más células cerebrales adultas; e igual mostraban un aumento en el número de conexiones entre las células cerebrales.
Estudios anteriores habían demostrado que situaciones estresantes y eventos desagradables suprimían el crecimiento de las células cerebrales en adultos. El estudio de los efectos del sexo en las ratas buscaba ver si las situaciones agradables podría tener un efecto contrario.